Sin duda alguna, el plato estrella de nuestra ciudad junto con el flamenquín y el rabo de toro es el salmorejo, pero ¿cuál es su origen?
El salmorejo cordobés como lo conocemos actualmente tiene su origen entre el siglo XIX y principios del siglo XX, ya que se cree que fue en esta época cuando se introdujo su ingrediente principal: el tomate.
La práctica de majar (o desmenuzar) los alimentos se remonta desde Neolítico pero tras la invasión del Imperio Romano en la península es cuando se empezó a utilizar el trigo en forma de pan, sopas o gachas.
Es en esta época cuando surge la mazamorra, plato antecesor del salmorejo que se elaboraba con miga de pan, aceite de oliva, ajo, vinagre y sal (aunque en la actualidad se sustituye gran parte del pan por almendras crudas y peladas, que mantienen ese color blanco o crema).
Con la llegada de Cristóbal Colón a América en 1492 se fue introduciendo el tomate en España y el salmorejo se convirtió en una crema roja debido a la incorporación tardía y casual de este ingrediente a comienzos del siglo XX, quedando la mazamorra relegada a un segundo plano, aunque en la actualidad se puede ver en muchos restaurantes cordobeses.
En la elaboración de este plato para dos personas únicamente se necesitan 1/2 kg de tomates, 100 g de pan, 75 ml de aceite de oliva virgen extra, 1/2 diente de ajo, una pizca de sal, jamón serrano y huevo duro para decorar.
¿Te ánimas a prepararlo en casa o prefieres hacernos una visita?