La Feria de Córdoba, una de las festividades más importantes y tradicionales de Andalucía, tiene sus raíces en el siglo XIII, cuando se celebraban mercados y ferias ganaderas en honor a la vida rural y comercial de la región. No fue hasta 1284, bajo el reinado de Alfonso X, cuando se formalizó como una feria agrícola, que con el paso de los siglos evolucionó hasta convertirse en una de las celebraciones más emblemáticas de la ciudad, donde se fusionan la tradición y la modernidad.
La feria, que se celebra tradicionalmente a finales de mayo, convierte a Córdoba en un escenario vibrante de música, baile y cultura. Durante una semana, el recinto ferial se llena de casetas, luces y vida, siendo un punto de encuentro para locales y visitantes.
Un elemento clave de esta celebración es el traje de flamenca, una vestimenta que ha pasado por una fascinante evolución desde sus humildes inicios. Originalmente, era una vestimenta utilizada por las campesinas y trabajadoras andaluzas, que usaban estos vestidos largos y cómodos para las labores del campo y los mercados. Con el tiempo, el traje fue ganando protagonismo en eventos sociales, especialmente en las ferias, donde se convirtió en un símbolo de la elegancia y el estilo de la mujer andaluza.
Hoy en día, el traje de flamenca es una pieza de alta costura que combina tradición con moda contemporánea. Aunque mantiene sus características esenciales, como los volantes, las mangas largas y los mantoncillos, los diseñadores han incorporado nuevos tejidos, colores y cortes, haciendo de cada feria una pasarela de creatividad.
Desde Casa Sirfantas, podrás disfrutar de esta maravillosa tradición caminando, ya que nuestra casa se encuentra a poca distancia del recinto ferial. Así, tendrás la oportunidad de vivir la Feria de Córdoba de manera cómoda y auténtica, siendo testigo de la magia que rodea esta emblemática celebración.
Fotografías: https://palogoca.com/